Belén enfrenta una Navidad sombría por segundo año consecutivo
Belén enfrenta una Navidad sin celebraciones tradicionales debido al conflicto en Gaza y las restricciones en Cisjordania, afectando su economía y comunidad.
25 de diciembre de 2024
La ciudad palestina de Belén, reconocida mundialmente como el lugar de nacimiento de Jesús, vive una Navidad marcada por la ausencia de celebraciones tradicionales debido al conflicto en Gaza y las restricciones impuestas en Cisjordania.
Impacto del conflicto en las celebraciones navideñas
Desde el inicio de la guerra entre Israel y Hamás en octubre de 2023, la violencia ha afectado significativamente a la región. Belén, aunque relativamente alejada de los enfrentamientos directos, ha sentido profundamente las consecuencias del conflicto. Las tradicionales festividades navideñas, que solían atraer a miles de peregrinos y turistas, han sido canceladas o reducidas al mínimo. La Plaza del Pesebre, usualmente iluminada y decorada, permanece oscura y desprovista de adornos navideños.
Restricciones y barreras en la ciudad
El ejército israelí ha intensificado las restricciones de movimiento en Cisjordania, instalando nuevas barricadas alrededor de Belén. Estas medidas han dificultado la llegada de visitantes y peregrinos, afectando directamente al sector turístico, pilar fundamental de la economía local. Anton Salman, alcalde de Belén, ha expresado que estas barreras representan un obstáculo significativo para la afluencia de personas a la ciudad.
Consecuencias económicas y sociales
La economía de Belén, altamente dependiente del turismo, ha sufrido una contracción notable. Comerciantes y guías turísticos reportan una drástica disminución en sus ingresos debido a la ausencia de visitantes. Joseph Giacaman, propietario de una tienda de souvenirs, describe cómo la falta de turistas ha obligado a cerrar negocios y ha sumido a muchas familias en la ruina.
Éxodo de la comunidad cristiana
Las dificultades económicas y las restricciones de seguridad han llevado a un aumento en la emigración de familias cristianas de Belén. El alcalde Salman señala que, en el último año, alrededor de 470 familias han abandonado la ciudad en busca de mejores oportunidades, lo que representa una pérdida significativa para la diversidad cultural y religiosa de la región.
Perspectivas futuras
La comunidad local mantiene la esperanza de que la situación mejore en el futuro cercano. Sin embargo, la continuidad del conflicto y las restricciones actuales plantean desafíos considerables para la recuperación económica y social de Belén. La ausencia de celebraciones navideñas por segundo año consecutivo refleja la profunda crisis que atraviesa la ciudad, afectando no solo su economía, sino también el tejido social y cultural que ha caracterizado a Belén a lo largo de la historia.