El valor de la filatelia para la cultura popular
Sin embargo, no hay entre los sellos emitidos por el país nada que representara los símbolos del territorio.
Juan Hernández Machado* Opinión/El Pregonero del Darién
Cuando el español Hernán Manríquez de Rojas solicitó, el 8 de mayo de 1589, establecer una estancia en el entorno del Cerro, a unos 10 kilómetros del centro de la ciudad de la Habana de entonces, nunca imaginó que alrededor de la misma se desarrollaría un gran pueblo que hoy constituye el Municipio del mismo nombre.
En ese discursar del tiempo hasta hoy se juntó la cultura española con la de los esclavos africanos y la naciente nacionalidad cubana, se derramó mucha sangre, sudor y lágrimas para desarrollar los barrios que hoy conforman el Municipio Cerro y, como es lógico, todo fue dejando símbolos para el futuro.
En el Cerro de la modernidad y desde 1995 se decidió, por el Consejo de la Administración Municipal, determinar los símbolos que identificarían al Municipio, los cuales, por su historia y aporte al desarrollo del Cerro fueron:
La llave. Proviene de varios cientos de años cuando la Zanja Real del Cerro era quien abastecía de agua a la Habana de entonces. Fue sustituida por el Acueducto de Fernando VII y posteriormente por el acueducto de Albear. A nivel popular, por esa razón, se inmortalizó la frase “El Cerro tiene la llave”, título de una guaracha son popularizada en 1947.
El bombín y el bastón, indistintamente, representan a los usados por la Comparsa “Marqueses de Atarés”, una de las más antiguas de la capital cubana con asentamiento en el Cerro
El alacrán, símbolo de la otra comparsa del mismo nombre, considerada la más antigua de la capital cubana.
El tulipán, flor representativa de los bellos jardines plantados en el Cerro en el siglo XIX, cuyo nombre fue concedido a una céntrica avenida del Municipio.
Por los resultados alcanzados por el Círculo Filatélico Cerro en los últimos 15 años, la Dirección Municipal de Cultura decidió dedicarle su Semana de la Cultura en el año 2012, efectuada entre el 6 y 12 de mayo pasado, a esta entidad y a la filatelia en general, como componente intrínseco de la cultura en el territorio.
Sin embargo, no hay entre los sellos emitidos por el país nada que representara los símbolos del territorio.
Por ello, la filatelia vino al auxilio de la cultura popular y la bella Cancelación Especial que se hiciera en la Gala de Clausura de esta importante semana, la noche del 12 de mayo del 2012, sí los dejó para la historia.
Recordemos que en filatelia se denomina Cancelación Especial aquella que es promovida por organizaciones filatélicas, gubernamentales, no gubernamentales, de caridad y otras, con autorización de la entidad de Correos del país de que se trate, con el fin de conmemorar un hecho o personalidad determinada.
Sobre un bello sello 65 centavos emitido en el 2001 por el 40 Aniversario del Instituto Nacional de Deportes, Educación Física y Recreación, que muestra a la Ciudad Deportiva, sede de dicha institución, una de las principales instalaciones del deporte en nuestro país y, coincidentemente, radicada en el Municipio Cerro, se colocó la Cancelación hecha para la ocasión.
Así, la misma llave que abrió las puertas de la capital cubana para dejar pasar el agua que le daría vida abrió las puertas de una tradición que comenzó ese 12 de mayo del año 2012, al hacer una cancelación especial filatélica en la Gala de la Semana de la Cultura cerrense y al ritmo de las comparsas “El Alacrán” y “Los Marqueses de Atarés”, todos marchamos alegremente a plantar nuevos tulipanes como expresión de satisfacción y también de compromiso al futuro, porque la filatelia marcha de igual a igual con otras manifestaciones de la cultura en el Cerro.
*Premio Nacional de Filatelia 2012 y miembro de la Unión de Historiadores de Cuba