Pensando en voz alta
Dijo el contralor que las ganancias bien escondidas fortalecen los intereses privados en detrimento de los pacientes.
Jaime Bedoya Medina/Opinión/ El Pregonero del Darién
¿Cuál extravagancia sacará la derecha ahora que el contralor, Carlos Mario Zuluaga, de la entraña conservadora, mostró con fundadas investigaciones cómo se pierde la plata de la salud donde “el sistema funciona muy bien”, según interesados en el jugoso negocio? Pues, Gaviria leyó una declaración destemplada tachando de mentirosa la denuncia; mismo hizo el insufrible Efraín Cepeda ambos dueños o partícipes del negociado.
El régimen marcha a las mil maravillas para quien tiene salud prepagada. Para el común de la gente, es una quimera. No dijeron nada sustancioso y si les queda algo de dignidad, tendrán que aprobar lo esencial de la reforma.
Preguntamos, ¿no les significan nada los 25 billones que deben a los hospitales y clínicas; no hacer las reservas de ley; tener integración vertical por encima del 30%, y hacer adelantos a sus clínicas, por servicios no prestados? Como los dueños de las promotoras y prestadores son los mismos, todo queda en casa y la gente, mamando.
Dijo el contralor que las ganancias bien escondidas fortalecen los intereses privados en detrimento de los pacientes. Si sucede en el centro de Colombia y en las grandes capitales, imagínense qué pasará en las periferias, como Leticia, Mitú, Riohacha o Quibdó.
Ya no tienen argumentos pues su prohijado que resultó muy corajudo e independiente de los grandes caciques, aunque procede de ellos, demostró que no les queda más camino que aprobar la reforma en su parte fundamental: giro directo a los hospitales.
Claro que las EPS seguirán, pues cumplen un papel logístico muy importante, como afiliar, conceder citas, proveer infraestructura, contratar médicos generales, etc. A ellas se les pagará por tan valioso aporte, pero no recibirán más dinero que el pactado.
*La Sergio Arboleda nunca tuvo prestigio. El efímero que empezó a cosechar, con la muerte del gran Álvaro Gómez cayó a la zanja. No hay egresados de renombre, carece de investigación científica. El exrector Noguera, íntimo de Uribe, era un estorbo moral e intelectual.
Tampoco su origen le auguraba algo bueno, pues don Sergio, según la historia sobresalió por su enfermedad esclavista, ambición por la tierra y la vida militar, fundamentos de inmensa fortuna.
Combatió al general y presidente, José Hilario López que decretó la libertad de los esclavos; hermano del Julio, militar y poeta, asesinado en Berruecos, Nariño como el gran mariscal Sucre. Ambos, conservadores.
Raro, las denuncias vinieron de Leonardo Espinosa, antiguo decano de la facultad de derecho. Duque hizo hasta lo imposible para mantener el statu quo de su desprestigiada Alma Mater. ¡Qué bonita familia!
*No entiendo por qué no sacan el ejército a la calle si la policía no es capaz sola porque faltan muchos miembros entrenados y experimentados. Pereira es muy vulnerable.
*La fiscal que puntea es de sólida formación moral y jurídica. Por eso tiemblan los que sabemos e invitan la corte a no elegir. Es decir, violar la norma. Cómo les parece pues de derecha esa familia política.