El Rincón de Miguel Ángel
Frente a esta presión, una junta provisional asume un gobierno inocuo, falto de poder y de entrada dividido.
Miguel Ángel Echeverri/Cultural/ El Pregonero del Darién
20 julio 1810: ni grito, ni independencia.
Los ultrajados y humillados, mestizos, negros, indios, manifestaron su indignación instrumentalizados por algunos criollos ambiciosos de poder, contra quienes representaban el dominio monárquico en tierras virreinales. Frente a esta presión, una junta provisional asume un gobierno inocuo, falto de poder y de entrada dividido; quienes asumieron no demoraron en mostrar su calaña y pudo más la ambición y el individualismo que la unidad y el firme deseo de lucha, por el logro de una verdadera libertad y autonomía.
No hubo tal independencia política, ni económica, ni cultural. Con la consigna «viva el rey, pero muera el mal gobierno», se da inicio a dos nefastos periodos de nuestra triste historia: La Patria Boba y la Reconquista, que facilitarán de nuevo la consolidación del dominio español sobre estas tierras hasta 1.819.