Los filatelistas y el correo
Lograr mejoras a los carteros y evitar tiradas clandestinas de emisiones postales.
Juan Hernández Machado*Opinión/El Pregonero del Darién
En Cuba tenemos tradición de esta afición. Previo a 1959 y durante muchos años, nuestros filatelistas pertenecían al Club Filatélico de la República de Cuba (CFRC). Desde allí su lucha con las autoridades postales fue incesante para participar en la destrucción de planchas y restos de las emisiones hechas, a fin de evitar los fraudes que se cometían.
La revista Actividades Filatélicas de agosto-octubre de 1944 expone que el CFRC le propuso al entonces presidente de la República, Ramón Grau San Martín, la reorganización del sistema postal cubano. Estos fueron algunos de los puntos presentados:
Crear la Agencia Filatélica de La Habana, el Museo Postal Cubano, un Comité para determinar qué hacer con el sobrante de las emisiones postales, sucursales postales en los barrios habaneros, y el seguro de la correspondencia.
Sustituir los buzones con texto “U.S. Mail” y otros existentes por unos más adecuados a la identidad cubana. Dividir La Habana en zonas postales según los sistemasmodernos. Lograr mejoras a los carteros. Evitar tiradas clandestinas de emisiones postales.
Rebajar el franqueo postal nacional a 2 centavos. Reorganizar la distribución de la correspondencia. Construir el Palacio de Comunicaciones. No encontramos en la literatura consultada la respuesta del presidente. Afortunadamente, la gran mayoría de ellas se hicieron realidad después del 1° de enero de 1959 para beneficio del pueblo y los filatelistas.
*Historiador Cubano-Premio Nacional de Filatelia.