El Rincón de Miguel Ángel
Todo queda en el papel, en compromisos meramente protocolarios y de momento.
Miguel Ángel Echeverri/Cultura/El Pregonero del Darién
Un alto en el camino fue la conferencia COP16, para tratar de generar conciencia en gobiernos y en ciudadanos sobre la necesidad del cuidado, defensa y protección de nuestro medio ambiente, de nuestros nichos ecológicos, de nuestros recursos naturales no renovables, de nuestra flora, de nuestra fauna.
La Conferencia permite observar las miserias y catástrofes sobre las cuales nadamos y la total indiferencia que manifestamos frente a tan horrorosa realidad.
Todo queda en el papel, en compromisos meramente protocolarios y de momento.
Los gobiernos no tienen la más mínima actitud de sonrojarse frente a su negligencia e inoperancia para tratar de frenar la voraz destrucción que realizan en los territorios de sus respectivas naciones.
Importa solo el hoy, destrucción y desolación; para un mañana, quienes nos sucedan, que se defiendan como puedan.
La COP16, ¿otro viejo y rayado saludo a la bandera?