Un fuerte pronunciamiento cargado de autocrítica, hace la Colombiana Humana en Urabá, ante la desatención del gobierno nacional a sus reclamos y solicitudes. Los dirigentes también anuncian que, a pesar de todo, seguirán apoyando el gobierno del cambio:
“La Urabá Humana, Atrato Gran Darién, (UHAGD) fue la primera expresión organizativa que desarrollo la comunidad Urabaense para apoyar desde el 2017 a Gustavo Petro, en su aspiración presidencial. Este modelo organizativo se inscribió ante la organización Nacional de Colombia Humana, como la primera región biogeográfica, por iniciativa de los facilitadores nacionales que en ese momento dinamizaban la campaña Petro Presidente.
En medio de la intolerancia política y desafiando todos los miedos recorrimos Urabá Antioqueño y chocoano, incluso en zonas donde se sentía el veto y el desprecio de algunas comunidades. Fue con sacrificio, dando lo mejor de nosotros, adelantamos giras con recursos propios que no teníamos, montamos campañas publicitarias artesanales y en contra de todos los pronósticos, logramos que se sumaran las comunidades afro, indígenas, mujeres viudas de la violencia, estudiantes, víctimas, campesinos y hasta profesionales independientes.
Celebramos en el corazón del paramilitarismo la primera asamblea de la UHAGD, poco después de la derrota electoral del 2018, aun exponiendo nuestras vidas.
Desde Antioquia comenzaron a tomar vocerías, actores que nunca aparecieron en la zona de Urabá. En el territorio la dinámica política era una y las decisiones que llegaban de Medellín y Bogotá, eran otras.
Para la campaña del 2022 desconocieron nuestra estructura política que había defendido el proyecto, incluso en la consulta anticorrupción donde sin candidaturas mantuvimos el fervor popular. La coordinación de la campaña en Urabá, según el gerente designado para Antioquia por orden del candidato presidencial, la entregaron a personas que nada tenían que ver con el proyecto político. Pero se impusieron nuestras convicciones del cambio y a pesar del “mal trato recibido”, no nos dejamos distraer y seguimos el trabajo que logró no solo mantener los guarismos electorales del 2018, sino superarlos, lo que nos daba la garantía que el gobierno y el presidente, tendrían muy presente el trabajo desarrollado en la única subregión de Antioquia donde habíamos logrado derrotar la derecha y las mafias políticas que tradicionalmente nos gobernaban, en las contiendas electorales.
Renunciamos a cualquier representatividad para el Congreso, asumiendo disciplina y la orientación oficial de Colombia Humana, aunque para infortunio nuestro, fuimos utilizados, pues ningún parlamentario reconoce el trabajo e incluso una senadora desconoció mecanismos internos del partido en la integración de lista a la asamblea departamental, impuso su voluntad con la fuerza de su credencial y no nos dejaron camino diferente al de sustraernos en el proceso electoral.
Con la tranquilidad del deber cumplido, esperamos pacientemente un llamado del presidente o de su equipo, para concertar acciones de gobierno en beneficio de nuestras comunidades, pero han transcurrido ya casi dos años de gobierno y el desconocimiento a nuestro trabajo ha sido total.
Lo mínimo que esperábamos era tener un enlace (Asesoría o Gerencia Presidencial para Urabá), que nos permitiera comunicación directa y fluida con el gobierno del cambio.
“Nuestros amigos” facilitadores del círculo de Gustavo Petro nunca volvieron a contestar el teléfono y quienes se ubicaron en el gobierno están dedicados a solucionarle el problema a su familia y círculo cercano de amigos.
No hemos clasificado para que el presidente nos atienda en audiencia, para expresar que tenemos unas líneas estratégicas de desarrollo para el Urabá y el Gran Darién. Los ministros vienen a la zona y se conectan con los mismos politiqueros que derrotamos y lo poco que llega a la región lo canalizan a través de ellos. No clasificamos siquiera, para entregar un documento al presidente, porque los filtros son impenetrables y nuestras comunidades con mucha razón nos reclaman y se sienten abandonadas y traicionadas en un cambio que seguramente solo será parcial, o ya no fue.
Señor presidente: ¡El problema nuestro no es de puestos! creemos firmemente que, si ayudamos a construir un gobierno, tenemos derecho a él, tenemos derecho mínimamente a ser escuchados. Nuestra credibilidad en la zona de Urabá está en cero y somos “hazmerreir” de la oposición que hoy, además, mantienen todos los cargos bajo su control político. Ni siquiera la más elemental, el DPS, continúa en manos de la derecha en un prolongado encargo. Muchos de nuestros líderes han tenido que abandonar el territorio, por la tensa situación, al no tener ningún resultado de nuestra gestión para la comunidad,
Seguramente el señor presidente no tendrá tiempo para leer este documento, seguramente lo van a mantener alejado de esta realidad y quienes hoy usufructúan el trabajo de este equipo harán lo imposible para que el presidente no se entere.
Hemos respaldado y seguiremos respaldando el Gobierno del Cambio, pero es necesario poder mostrar a nuestra gente que valió la pena, que podemos cambiar la historia, transformar nuestra realidad, pero también es necesario que el gobierno y el presidente nos digan con sinceridad porqué el veto”
Turbo, marzo – de 2024.
Urabá Humana, Atrato Gran Darién
El citado documento, trae las firmas de varios voceros de esa organización política en el Urabá como: Guillermo Peña Moya, Antonio Vásquez, Manuel Elvin Ayala, Jairo Cuesta, Arnold Rentería Sánchez, Jhonys Berna Guzmán, Candelario Angulo, Wilson Andrade, Adolfo Alean, Epifanio Cuesta, Fredy Galán, Nelly Machado, Emiliano Velásquez, Eusebio Mosquera, Leonardo Rodríguez Vargas, Elmer Obregón y el enlace departamental y nacional, UHAGD, Félix Amín Tovar Tafur.