Silenciar a Mancuso va contra las víctimas

Luis Alfonso Ossa B. /Opinión/El Pregonero del Darién

No se le hace extraño al país, por decir lo menos, que sea precisamente la Procuraduría la que se oponga a que Salvatore Mancuso pueda contar todo lo que tiene que decir alrededor de los miles de asesinatos que su organización paramilitar perpetró con el auspicio de agentes del Estado, de militares y de terceros que mediante sus auspicios financieros lo armaron para que terminara cometiendo tantas barbaridades, sólo comparables con las de sus contrincantes los grupos guerrilleros.?

¿Cómo se le puede ocurrir entonces a la Procuraduría oponerse a que Mancuso sea procesado por la Justicia Especial para la Paz? ¿A que le temen aquellos poderosos que le ordenaron a la Señora Cabello interponer tan atrabiliaria tutela, que termina siendo contra los miles de víctimas que Mancuso y sus patrocinadores cargan en sus conciencias?

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Camisas manchadas

Quién   después de las marchas del  anterior domingo  puede negarnos que las camisas blancas de los colegas trabajadores de la salud que allí asistieron, quedaron manchadas de  indignidad al haberlo hecho por lo que ellos de buena fe creyeron, pero también terminaron haciéndolo por los corruptos condenados muchos, otros todavía impunes, que asaltaron los dineros de la salud llevándola al colapso que obligó a este gobierno  a presentar la reforma a la salud contra la cual muchos colegas marcharon, terminando  defendiendo a los ladrones que desde Las  EPSs asesinaron miles de colombianos que nunca pudieron por ello ser atendidos.

Las emblemáticas camisas blancas de los trabajadores de la salud que salieron a marchar contra una reforma que el Estado  quiere rescatar  de las mafias traficantes de la vida que terminaron siendo las dueñas de las EPSs, esas camisas blancas del domingo  entonces, que terminaron marchando por los ladrones de los dineros de la salud, quedaron manchadas de indignidad, así como quedaron las camisas blancas que usaban los médicos cuando en Chile salieron a marchar contra Salvador Allende, terminando a la sazón unidos a quienes al mando de Pinochet derrocaron el  legítimo gobierno de Allende.

Por la Fiscalía

He acá entonces una de las tantas razones por las que la gente de bien esta tan incómoda con la llegada de la nueva fiscal, la misma que está levantando el tapete encontrándose con información muy comprometedora para la gente de bien, información que además también aparece en la delicada información que el Departamento de Estado norteamericano ha desclasificado.

La aparición a la luz pública de esta aterradora verdad claro que los puso incomodos y por supuesto que se vuelve una poderosa razón para marchar contra el gobierno de Petro las veces que sea necesario.

Ferrocarriles

Con el Decreto 0510 de 2024, el Gobierno Nacional, a través del Ministerio de Transporte y Ambiente modificaron el decreto 1076 de 2015, para poder excluir el requerimiento de licencias ambientales para la construcción de proyectos férreos urbanos con el uso de electricidad y bajas emisiones de gases.

Y mientras más sean los obstáculos que se puedan superar en esta materia  sin volarse las normas por supuesto , mucho más expedito será el avance del  proyecto de recuperación de los ferrocarriles, con  mayores posibilidades por tanto de que al terminar este gobierno los ferrocarriles nacionales hayan sustituido  ya un alto porcentaje de las miles de toneladas de carga que hoy se mueven por las carreteras mediante el transporte tradicional y muy costoso en tracto mulas, rebajando así esos altos costos que esta modalidad  de transporte tradicional le imprime  al precio final de las mercancías.

Petro pedía escuchar al pueblo

Por supuesto que todos en el Pacto Histórico debemos seguir creyendo en esto que decía el trino del entonces Senador Petro y que en ese entonces él le enrostraba al presidente Duque. Por tanto, cuando hoy estamos en el gobierno, es a Petro a quien le corresponde aplicar la convocatoria que en ese entonces Él le hacía a Duque.

Empecemos por organizar el partido político que administre hacia afuera lo que desde el aparato del estado se viene haciendo sin que en ocasiones difundamos con la fuerza suficiente para que las gentes se apropien de ese Cambio.

 ¡Usted solo, ¡Sr Presidente Petro, no puede hacerlo todo! No podemos continuar minimizando la ausencia del partido político como instrumento puente entre el Pacto Histórico y el pueblo que votó por el gobierno del cambio.

Todavía tenemos tiempo de recuperar por lo menos parcialmente la hoja de ruta que poco a poco, a veces muy rápido hemos venido perdiendo. Y así no podamos recuperar la totalidad de lo perdido, por lo menos debemos intentar dejar esa hoja de ruta así enmendada, para que el electorado no nos abandone de manera significativa y podamos estar entonces nuevamente en la plaza pública proponiéndole al país los proyectos de cambio que no logremos conseguir en el tiempo que nos queda del gobierno Petro.

Gobernabilidad

Estas marchas tan multitudinariamente opositoras convocan al gobierno a la sensatez, la misma que pasa por el deber de aceptar la negociación de la gobernabilidad con todos los partidos, partiendo de aceptar la introducción de algunos cambios en la profundidad de aquellas reformas paradigmáticas con las que el Pacto Histórico ganó la presidencia pero que no han logrado concitar las mayorías parlamentaria necesarias para lograr sacarlas adelante.

Para bajarle entonces la crispación a la aguda confrontación nacional que hoy vimos en las marchas, se hace necesario entonces hacer algunas concesiones que permitan recuperar gobernabilidad.

Expectativas

Quiero que recordemos al exministro Gilberto Echeverry quien un día amaneció con su regionalismo alborotado y acuñó una frase que decía más o menos que en algunos años el mundo pasaría inexorablemente por la mejor esquina de América, es decir por Urabá.

En pocas semanas se disparó la invasión a lo largo y ancho de los municipios aumentando por consiguiente la violencia ya de por si asentada con fuerza en la región.

El panorama económico que describe El Colombiano en la perspectiva de un año que falta para la apertura de Puerto Antioquia podría producir un efecto parecido o mayor al que produjo aquella frase y hoy como ayer la infraestructura necesaria para recibir con acierto una inmigración desbordada de gentes que lleguen con la esperanza de haberlo hecho al nuevo paraíso del país, pue sigue siendo todavía insuficiente para suplir los anhelos de ese montón de gentes que vendrían a Urabá.  Creo que El Colombiano debería mesurar esa narrativa desbordada de esperanzas que despliega en su crónica de alrededor de Puerto Antioquia.